Los mercados mostraron señales de recuperación con un ánimo más positivo, impulsado por la evidente posibilidad de que la Reserva Federal adelante un recorte en las tasas de interés. Este cambio de expectativas se da en un contexto en el que también emergen señales diplomáticas alentadoras en torno al conflicto entre Rusia y Ucrania, lo que ayuda a moderar la percepción de riesgo a nivel global.
Según datos de Reuters, los inversores están apostando a que la FED recorte las tasas en septiembre.
Así mismo, la posibilidad de avances en una solución diplomática para el conflicto entre Rusia y Ucrania ha impulsado el ánimo en los mercados europeos, con expectativas de disminución en los precios del petróleo y una leve apreciación del euro.

Este escenario se enmarca en un contexto económico global marcado por una inflación aún persistente en EE.UU., pero con indicios de moderación. La reducción de las tasas de interés podría facilitar el crédito, alentar el consumo y sostener el crecimiento. Sumado a esto, cualquier avance hacia una solución pacífica en Europa del Este podría reducir la presión sobre los precios de energía y estimular la confianza empresarial.
Con el recorte de tasas por parte de la FED, podríamos ver una inyección de liquidez que revitalizaría el consumo, las inversiones y los mercados emergentes (divisas y activos de economías en desarrollo podrían fortalecerse ante mayor apetito por riesgo y condiciones financieras más favorables).
Mientras que el avance hacia la paz en Ucrania podría estabilizar los precios de los commodities, fortalecer el crecimiento europeo y aliviar los márgenes de energía.